La limpieza dental profesional se debe realizar cada 6 a 12 meses para asegurar condiciones óptimas en el cuidado y mantenimiento de la salud de dientes y encías.
Cuando no acudimos regularmente a practicarnos una limpieza dental, se acumula placa bacteriana y sarro en los dientes, dando como resultado la aparición de gingivitis, caries, halitosis (mal aliento), pigmentaciones y otras afecciones que pueden complicarse y evolucionar en enfermedades más graves.
Básicamente, se lleva a cabo en tres pasos que concluyen en una cita de 45 minutos aproximadamente.